La montaña más alta de Ghana

No. No os penséis que me he vuelto ahora aficionado al alpinismo, no… aunque siempre he pensado que es algo fascinante. Pero bueno…que para que te guste la montaña no hace falta subir a grandes cumbres, no?? Pues eso…que como siempre me ha gustado más la montaña que la playa…en nuestras vacaciones dijimos…haremos alguna excursioncilla, no?? Dicho y hecho.

Realmente no estaba demasiado pensado, pero surgió. Teníamos planeado ir a la zona este de Ghana (Volta Region), donde está el embalse más grande del mundo, el Lago Volta (ocupando un 3,3% de superficie nacional, 520 Km de un extremo a otro, y capacidad de 148 Km3, todo esto según Wikipedia, jeje). Tampoco es que fuéramos a ver ese lago…aunque nos dijeron que la presa estaba chula, pero pasamos de largo. Lo que pasa es que esa zona es bastante turística para la gente que hace “eco-turismo”, que ya conté en otro post. Hay cuevas que visitar, un montón de cascadas/cataratas (cuál es la diferencia??), sitios para hacer senderismo, parques naturales de monos…y cosas así. Así que allá que fuimos, a Hohoe. El viaje fue en tro-tro, toda una experiencia…pero eso ya lo he contado, jeje.

Estuvimos en un hotelillo de un pueblo de al lado de Hohoe, Wli, donde nos hicimos muy amigos de la dueña…Martha era ya como de la familia, jaja…la pobre creo que estaba esperando que nos fuéramos de tanto que le daba el coñazo preguntándole cosas, jeje. Total que una vez allí hicimos los planes: queríamos ir a ver unas cascadas, subir al monte más alto de Ghana, y visitar el Monkey Sanctuary.

Lo primero que decidimos fue ir al monte este, el Afadjato (pongamos que se escribe así, ejej). Lo dicho, no os creáis que esto es el Kilimanjaro…apenas pasa de los 850 metros…jejeje…Burgos está más alto que eso!! Pero bueno…una excursión nunca viene mal. Sin forzar demasiado…que con el calor que hacía nos podría haber dado algo!!jaja.

Tuvimos que gestionarnos el transporte desde el hotel hasta el sitio donde se sube, que estaba un pelín lejos. Nuestra amiga Martha nos pidió un taxi para las 6 de la mañana, porque no queríamos subir con todo el sol…pero era una mierda de taxi que se caía a trozos y además súper caro, así que decidimos que no. Total…que al final tuvimos que esperar hasta las 9 y fuimos con un grupo de estudiantes estadounidenses que estaban en el hotel y también iban a subir la montañita esta. Estos tenían un tro-tro alquilado para ellos…así sí!!!

Una vez en el sitio tuvimos que pagar por subir…sí sí, parece ser que el monte aquí no es de todos, sino del más listo que se monta el negocio de cobrar por subir y además ponerte un “guía”. Pero bueno…nosotros pagamos y subimos con el guía. Nos separamos de los americanos…porque no nos fiábamos demasiado del ritmo que pudieran llevar…no es que nosotros lleváramos un ritmo endiablado, jaja…pero sólo tenéis que ver las fotos!!

Algunos de los americanos que estaban en el hotel.

La subida bien, sudando todo el rato….porque aquí a nada que haces un poco de ejercicio empiezas a sudar una barbaridad. Fue una subida cortita…pero como esta gente no conoce el zig-zag sino que van todo recto hacia arriba…sí que cansaba un poco. Arriba con viento ni tan mal…se agradecía mucho. Y nada, un poco de vistas en general, mucho bosque y Togo que estaba justo en frente, por lo visto la siguiente montaña ya era Togo. De hecho yo recibí mensajes de “Bienvenido a Togo”, eso cuenta como país visitado, no?? Por cierto..a la bajada nos encontramos a algunos de los americanos que subieron, otros ya hacía tiempo que se habían dado la vuelta, jaja.

Se subía desde ese pueblecillo.

Por lo visto eso ya es Togo.

Mi sudor con forma de corazón...si es que soy un romántico!!

Ojo al guía subiendo con chancetas.

Después una cerveza para recuperar nunca está de más, entra genial. Y nada, para el hotel otra vez con el transporte que nos gestionó otra vez nuestra amiga Martha, jaja, moto-taxi!! Esto sí que mola…y por lo visto es bastante utilizado por la gente de ahí. Así que ahí fuimos los tres en la moto por 10 Ghc (5€), gran experiencia, jeje.

Revitalizante!! La flor curiosa que olía a chicle de melocotón, jeje.

He aquí el moto-taxi.

Ah!! Luego por la tarde intentamos ir en bici a ver unas cuevas en un pueblo cercano. Pero las bicis estaban hechas polvo y no hubiéramos llegado nunca…así que nos dimos la vuelta y fuimos a un bar (opción mucho más interesante dónde va a parar). Por cierto…habíamos visto el árbol del mango alguna vez??? Yo no…me impactó tanto, jeje…que majo es…luego ya veía por todos los lados, pero es súper curioso!!

El mangoooooo (no manglar, ok ok). Qué majo!

Bueno, otro día más!!